Descanse en paz, Sor Griselda

Con enorme tristeza lamentamos la noticia del fallecimiento de Sor Griselda González Blasco, religiosa del colegio de Nuestra Señora del Rosario de la Congregación de Santo Domingo y asistenta de la Orden Tercera de Santo Domingo. Durante años estuvo muy ligada a nuestra Hermandad y en especial al cuidado a nuestra madre María Santísima de la Estrella.

Elevamos una oración por su descanso eterno, para que nuestro Padre Jesús de la Pasión la acoja en su Reino y que su amadísima María Santísima de la Misericordia la guarde bajo su manto. Y para ello queremos recordar las palabras llenas de cariño que en su día le dedicó Antonio González en su pregón del año 2003:

Benditas sean las manos
que prenden hilos de seda
para tejer mil encajes
en sueños de primavera.

Benditas sean las manos
que el mismo Dios escogiera,
para servirse de ellas
en tan hermosa tarea.

Escogidas en la cuna
las fue mimando de cerca,
llenándolas de ilusiones
al desposarse con ellas.

Benditas sean las manos
que sostienen las tijeras,
que hacen de un trozo de raso
un manto para la reina.

Si supieras Madre mía
benditas sean sus manos,
donde se cosió tu saya
donde se cortó tu manto,
donde cayeron los hilos
de ese primer hilvanado.

Fue entre los rezos primeros
de unos niños que cantando,
aprendieron una salve
allá por el mes de mayo.

Fue entre sonrisas ingenuas
donde se llenó tu manto
de la párvula inocencia
de los niños del Rosario.

¿“Seño” y eso qué es?
dice un niño atribulado
sin saber que allí su “seño”,
benditas sean sus manos,
esta soñando con verte
vestida con ese “trapo”.

Benditos sean los sueños
de las manos que cortaron
una saya de oraciones
y un manto de cien rosarios.

Y tú Divina Señora,
mejor que nadie lo sabes,
que son benditas las manos
de aquella que tanto te ama.

Por eso es de obligación
hoy que soy el pregonero
hacer esta reflexión
en voz alta al mundo entero.

Que benditas son las manos
que cosen en el silencio
las ropas para una Virgen
que es la Reina de sus sueños.

Su nombre benditas manos,
todo el mundo conocemos,
mas no quiero revelarlo
por discreción y respeto.

Pero si puedo decir
que Bendito es el misterio
que en su nombre lleva ella
y que benditas las manos
que cosen para ti, Estrella.

Share This: