Como cada año, hemos comenzado la Cuaresma con la celebración de la Santa Misa e imposición de la ceniza en nuestra parroquia.
El pasado miércoles, 1 de marzo, compartimos con toda la comunidad de la parroquia de Nuestro Salvador el inicio de este tiempo de oración, penitencia y ayuno, en el cual nos prepararemos para la llegada de la gran fiesta de la Pascua. Además, tuvimos la suerte de compartir esta celebración con un grupo de estudiantes de Cuenca que tuvieron a bien acompañarnos aprovechando su viaje a Granada.
Es tiempo para arrepentirnos de nuestros pecados y de cambiar algo de nosotros para ser mejores y poder vivir más cerca de Cristo. La ceniza es un signo de arrepentimiento, de penitencia, pero sobre todo de conversión. Es el inicio del camino de la Cuaresma, para acompañar a Jesús desde su desierto hasta el día de su triunfo que es el Domingo de Resurrección.